domingo, 19 de julio de 2009

LA ESFERA DE MI SOLEDAD



Ayer cuando te fuiste me quedó un sabor amargo

(soledad)

el silencio pegó gritos estruendosos

(soledad)

mi corazón tembló de frío

(soledad)

me reflejé en el espejo y me ví triste y solo

(soledad)

Apagué las luces y quedé solo y a oscuras

(soledad)

y soñé

-en soledad-

contigo.

Por favor ... volvé
no soporto estar envuelto en la esfera de mi soledad

CON LA LUNA DE TESTIGO (fragmento)


...Rosa la apretó con todas sus fuerzas. Le resultaba encantadora su timidez y abrumadora su valentía. No volvieron a hablarse hasta mucho tiempo después. Durmieron con sus patas enredadas y sus trompas sumergidas en la pomposa lana de Rosa. Dolly intuyó que eso era lo mas parecido al amor. Rosa, en cambio, estaba segura.

lunes, 6 de julio de 2009

POETAS


Tal vez no ha pasado mucho tiempo desde que lo he dejado de ver, pero lo suficiente como para que su ausencia me obligue a escribir estas líneas.
Lo que importa en todo caso, es todo lo que él significaba para mí. Y eso, ya era decir mucho.
Durante las últimas vacaciones que pasamos juntos me confesó que me amaba y que no imaginaba un instante de su vida sin mí. Fue raro lo que sentí en algún lugar de mi cuerpo, ni siquiera podía advertir donde, solo que lo sentía. Y eso me hacía arder la conciencia.
Ernesto era un hombre hecho y derecho. Tenía todo lo que un hombre podía llegar a ambicionar jamás. Trabajo, esposa, hijos. Absolutamente todo. Y también me tenía a mi. Yo venía a ocupar el lugar de amante. No era el lugar que ambicionaba pero no me quedaba opción.
Cada vez que él deseaba verme solo bastaba con hacérmelo saber. Y yo, como si fuera su lacayo estaba presto a servirle. Pero no lo hacía por nada, eso estaba claro. Pero él no lo pudo ver. Y si lo vio, poco caso le hizo.
Ernesto tenía todo lo que yo siempre deseé tener. Y a decir verdad, lo envidiaba completamente. Absolutamente todo, hasta su genio. Él era poeta. Yo también, o al menos siempre he querido serlo, pero no he sido tan afortunado como él, que podía darse el lujo de vivir de su arte tan tranquilamente que le bastaba con escribir. Y eso no era algo que le demandaba mucho tiempo. Por el contrario. Escribía con la facilidad de una mujer para caminar o hablar. Y eso también le envidiaba. Pero yo también era actor, claro que tampoco había corrido con suerte en esto del arte dramático, por decirlo de alguna manera, apenas había llegado a participar de un grupo de teatro independiente del que tempranamente me terminaron echando. Pero no había perdido el oficio. Era muy buen actor y sabía mentir muy bien, que en definitiva resultaban ser la misma cosa. O al menos, servían para un mismo fin.
Cada vez que me dirigía a él lo hacía con una envidia disfrazada de admiración, que él, por supuesto y gracias a mis dotes para la actuación, creía. Lejos estaba de ser un hombre ejemplar, aunque reunía con las condiciones para serlo. Y eso es lo que mas le envidiaba. Su tenacidad en hacer las cosas difíciles cuando las tienes todas fáciles. ¿Qué más daba? Su vida hubiera resultado aburrida o muy poco interesante.
Nos conocimos en una fiesta cuya eventualidad era la presentación de su ultimo libro de poesías titulado “Las bocas de las ballenas hambrientas”. Era un libro interesantísimo sobre unos poemas que hablaban de la vida en el mar. Recuerdo que cuando abrí por primera vez ese libro leí el poema numero veinte: “SIRENA” Era realmente conmovedor. Me había quedado embobecido.
Esa noche en esa presentación, Ernesto estaba acompañado de su mujer y de uno de sus hijos de siete años. Amanda fue quien nos presentó. Ernesto, le dijo, él es un joven admirador suyo y me señaló a mí tomándome por los hombros obligándome a darle un beso al que por supuesto no se resistió. A partir de ese momento sus ojos se posaron sobre los míos y en lo que duró esa presentación no volvió a quitármelos de encima. Yo sentía que su mirada me penetraba de una manera muy sinuosa, casi incómoda. Esa noche comprendí que en esa mirada estaba mi mas soñado futuro y que no podía esquivarlo. Que de ser así, significaría la muerte y el fracaso. El poco tiempo que me llevó entender esto me bastó para no distraerme un solo instante. Me aferré a su mirada tan fuerte como para no caer. Mis párpados no volvieron a cerrarse hasta la noche siguiente que me abrazó la oscuridad.

JUVENTUD, DIVINO TESORO


Apenas salgo del vientre
Un halo de aire me envuelve
Sonrío como quien descubre oro en tierra ajena y se calla.
De golpe,
Lloro con la suavidad con la que una pluma cae en el viento.
Y descubro –a destiempo-
La lozanía de mi rostro casi perfecto.
Pero algo se corrompe,
Se pierde en el aire, como aquella pluma que no ha llegado a buen puerto.
El reflejo de mi rostro en el espejo, llora lágrimas secas.
Inútil – es
Hacer algo por cierto
Una maraña de espectros levanta un volcán con lava hirviendo.
Y es en vano intentar,
Que mis lágrimas apaguen el fuego,
Pues es mas fácil pedirle a mis manos que intenten romper el deshielo.
Y siento una joven punzada en el estómago
María me dice que es el amor
(¡¿Eso es el amor?!)
Presiento
Y admito equivocado
Que es esto y no aquello
Que eso que eyaculo
Es solo un líquido fértil.
Un globo que se infla dentro de mí que se contrapone a
Una aguja que me mira con las ansias de explotarlo
(-Subcutáneo-)
Ameba grisácea con matices rubios y
La plutónica levedad del alma que se envuelven en los vientos huracanados de la juventud.

LIMITES



¿Hasta donde es capaz de llegar el agua abrasadora de los ríos?
El miedo invade por los poros
Salpica fuego
Y yo me abstraigo hasta sentir que algo me aprieta por la espalda.
Inmensa pared blanca.
El “Stop” de mis deseos,
La canción que se deja oír fuerte como un dolor mezquino
Que en algún momento cesa.
Que se detiene.
Con un botón que aplomo y me obedece.
Y aunque quiera ya no puede
Aunque grite e insista con la fuerza de un gigante.
Se detiene.
Y empieza –justo allí donde termina-
Otro.
Nuevo.

domingo, 28 de junio de 2009

EL DESPLIEGUE


¿alguna vez tuviste la oportunidad de presenciar el despligue de la cola de un pavo real?

pues no lo dejes de hacer.

anda al zoo

compra una entrada

Y DISFRUTÀ.

puede ser que tengas que esperar un buen rato, pero vale la pena.

vale la pena.

jueves, 18 de junio de 2009

los exs


Puedo recordar un ex amigo,

una ex pareja,

un ex trabajo,

un ex colegio,

un ex barrio,

una ex vecina,

un ex compañero


a Medida que el tiempo pasa y nos vamos poniendo viejos, la vida se encarga de hacernos perder cosas que muchas veces resultan preciadas y llenarnos de ex condiciones que solo sirven para entender que el paso del tiempo hace estragos irrevocables y a veces, incluso, geniales.

Pasamos asi de un niñez dorada a una adolescencia fresca y dificil y queda en eso que algunos añoran y que otros tantos detestan: el pasado

lo que resulta inexzorable es el transitar continuo.

el saber que vamos a morir tarde o temprano y que el tic tac del reloj nos llega en algún momento.



pero todo eso está enterrado en mi pasado,

ahora forjo mi presente,

este que ahora vivo

este que ahora escribo.

EL SUICIDA


pues bien, está claro.

NADIE QUIERE SUICIDARSE.

lo que el suicida quiere es DEJAR DE SUFRIR, PERO YAAA!

por eso pide ayuda, a su manera, pero la pide.

Entonces el entorno no puede escucharlo cuando pide auxilio.

SI. PIDE AUXILIO.

pues si el entorno, lo escuchase, "debería" hacer algo, y como no sabe que hacer, una buena excusa es NO CREER.

por eso cuando alguien nos anuncia su propio SUICIDIO, nuestra primera reaccion es NO CREERLE, y entonces, como boludos ignorantes deducimos que "el que lo dice no lo hace".

Y ESO NO ES ASI.

lo que mejor mitiga al dolor es el cariño y el afecto.

si a través de esos sentimientos le hacemos ver que es posible dejar de sufrir, que la muerte no es la única salida, pobrablemente se aferre a esta salvacion que le brindamos.

Debemos darle tiempo a que razone y a que encuentre otros modos de superar la crisis y que no atente contra su vida.

Y de ahi viene la importancia del abrazo a tiempo, de la caricia justa...

No cuesta nada demostrar afecto.

Y ya ves, puede salvar una vida.

al menos, hasta que puedan encontrar algo porque vivir, demoslé alguien a quien le importa que el viva.

viernes, 5 de junio de 2009

los decididos y yo.-


a veces la vida nos regala cosas maravillosas, a veces no
no siempre uno sabe ver que hay algo bueno a su alrededor, o si
o no se
y hasta a veces uno sabe que no quiere ver algo porque le afecta demasiado

pienso que la humanidad se divide entre aquellos que saben lo que quieren
y entre esos otros que apenas sabemos que queremos todo y no aceptamos que eso
no es posible.

algunos lloramos, sufrimos, nos deprimimos
otros la tienen mas clara y no dudan en pedir el combo tres
otros no las tenemos tan clara y no sabemos que decisión tomar.
No hablo de decisiones importantes.
¿Coca común o coca Light?

lunes, 1 de junio de 2009

el cuento empieza...


todo tiene un final

y este cuento no es la excepcion

pasa la vida y otras tantas cosas


y estamos llegando a ese que dicen, es el fin.

pero el nuestro mi ADA, está escrito por vos y por mi...

es por eso que el cuento recien va a empezar...

es tan simple el hecho de saber

que los cuentos empiezan con había una vez

y sentir que la magia se enciende al oír

ese ruido a cosquillas que tus manos hacen en mi

y al mirarte te encuentro a mi lado

¿y hace falta mas que eso?

¿hace falta triunfar?

¿Vale la pena?


ya no pensemos en eso mi ADA

es hora del tiempo dejarlo correr

y sentir que estamos

y que no hay NADA QUE PERDER


no estés triste cuando yo esté lejos

pues siempre a tu lado estaré...

quien dice, los sueños se pudean cumplir!

confiemos en eso mi ADA

que no cuesta nada

luchar por amor.


y aunque seamos olas de un mismo mar,

podemos rompernos y volvernos a ver

quien dice, el destino esté cerca

y si es así te quiero decir

que no voy a poder, no ahora, lo se

y aunque intento, no puedo, yo irme sin vos.


Y al irme en intentos fracasa mi voluntad

que mas le pido la vida?

a mi ADA.

tan mía. tan mía. tan mía.




el cuento empieza a escribirse

y si es así,

son nuestros puños los que deben escribir: había una vez...

viernes, 29 de mayo de 2009

C A R N E


MANU
Cuando era chico y tuve que desnudarme frente al médico por primera vez tenía once años, me dijo que me desnudara y le hice caso… pero no pude evitar que se me parara.

NICO
Y el que te dijo

MANU
Que era puto

NICO
Y eso te ofende?

MANU
Bueno no, pero digamos que no es la mejor manera de enterarse que sos puto… y vos?

NICO
Yo que

MANU
Digo, vos?, como te enteraste que sos puto?

NICO
No se

MANU
¿No sabes?

NICO
Calculo que de pendejo… cuando iba a natación solo a esperar que se haga la hora de las duchas… después me hacia unas pajas tremendas

MANU
Entonces lo supiste desde siempre

NICO
Aha

MANU
Que bueno

NICO
Vos no?

MANU
Si supongo que si, pero lo tenía reprimido, quizás me hacia falta encontrarme con una persona que me lo dijera.

NICO
Y fuiste al medico

MANU
(Asiente) …y a vos te gusta ser puto?

NICO
Si, porque

MANU
No se te pregunto.

NICO
A vos no?

MANU
Si, igual no tengo mucha experiencia.

NICO
Pero chupaste una pija me imagino?

MANU
Niega con la cabeza

NICO
Te cojieron?

MANU
Niega con la cabeza

NICO
Sos virgen?

MANU
Si

NICO
Y te gustaria dejar de serlo

MANU
Si pero no tengo con quien

NICO
Yo conozco a mas de uno que te harian el favor

MANU
Y vos? No me harias el favor?

NICO
(muestra el pito flaccido)
Esta muerta pero si la chupas se para

viernes, 22 de mayo de 2009

POR MI CULPA, POR MI GRANDISIMA CULPA

Fui a almorzar algún lugar cerca de la ruta, porque necesitaba escribir y ese lugar, (esas calles inmensas donde los autos viajan a la velocidad de un rayo y esa vista placentera que te permite ver el horizonte cuando manejas aunque ese horizonte sea un cielo celeste inmenso y torturador), me inspira. Además seguía latente algo y desde ayer que no paraban de venirme imágenes todo el tiempo y trataba de bajarlas al papel pero no daba a basto. Era demasiada inspiración junta. Hacía mucho tiempo que no me sobraba inspiración. Escribí un par de líneas. El día transcurrió calmo y sin sobresaltos, cuando cumplí con una considerable cantidad de palabras que traía conmigo decidí volver. De regreso a casa, me atacó el hambre. Estacioné el auto en una estación de servicio sobre la ruta y entré al autoservice y me pedí un café con dos medias lunas de manteca. La cajera me llamó la atención, era una japonesa de alrededor de unos 25 años con una piel mas blanca que la leche. Y en ese momento se me ocurrió empezar a escribir una historia de mafiosos japoneses que usurpaban una estación de servicio y se hacían millonarios, pero el dilema estaba en que la joven hija del matrimonio de japoneses estaba como una especie de esclava ad honores se había enamorado de un argentino y que por la religión que profesaban no le permitían formar una familia con una nacionalidad extranjera. Y la historia terminaba con un final triste y un mensaje claro: la japonesa tenía toda la plata del mundo pero no podía ser feliz. Y después se me ocurrió una segunda parte: cuando ya estaba destinada a la temible soledad y a su rutina de cobranzas, llega (por esas casualidades mágicas de la vida que suceden solo en las novelas) un japonés a comprarle un café con dos medias lunas y se terminaban enamorando. Tienen hijos, comen perdices y la felicidad le dura toda la vida.
Volví a mi café y a mis medias lunas cuando me distrajo una sirena de ambulancia que sonó estrepitosamente. No sé en que momento exacto fue que ocurrió pero ocurrió: ¡La japonesa se había desmayado! Por un minuto creí haberla engualichado. Y a toda velocidad la subieron a una camilla y la metieron en la ambulancia y nunca más la vi. Y miré instintivamente a mí alrededor y los pocos que estábamos en el local nos quedamos consternados. Incluso una vieja que estaba sentada a pocos metros míos lloró. Su llanto duró un segundo hasta que volvió a dirigir la mirada a su café que revolvió desdeñosamente. Era raro, como si hubiera estado premeditado porque era increíble con la velocidad con la que la asistieron. La vieja me miró y actué un par de caras como si me hubiera caído un balde agua fría. Me sentí su cómplice. La vieja me miraba con ganas de hablarme, de hacerme esos comentarios “clásicos” que se hacen en estas ocasiones pero preferí no darle cabida. Tomé de un sorbo mi café, tomé las medias lunas y antes de irme le dibujé una sonrisa amable pero irónica.
Cuando me quise dar cuenta, ya estaba en la ruta de nuevo, manejando camino a casa pero esta vez si me obligué a no detener el paso y a no pensar en otra cosa que no fuera mi historia.

jueves, 21 de mayo de 2009

C E C I L I A

Se llamaba cecilia aquella mina
Tuvimos una historia muy divina
Y a pesar que siempre coincidimos
El destino separó nuestros caminos

Bastaba con solo a ella mirarla
Y sus mejillas se ponían coloradas
Radiante fulgoroso su peinado
Un lacio y un color muy envidiado.
Naturales como cada uno de abriles
Recordados por infanto juveniles.

Y quince de los años que tenía,
Los pasamos en el limbo de la vida
Y a pesar de aquello que nunca se olvida
Tertulias, un festejo una salida.

Y el amor lo hicimos tras unas montañas
Que quedaba en una plaza en las vías
Y el tren era un cómplice extraño
Y el subi baja un ascensor que nos movía.

Y un gordo muy estúpido engreído,
Que además de gordo se hacía mi amigo,
Se cogió a mi a cecilia a escondidas
El traidor se fue con ella y ella ardía
De la nuca me puso ese día
El gordo se cogia a mi cecilia.

Y pensar en vacaciones compartidas
Y en los sueños que soñamos aquel día
En que ella me propuso separarnos
Y la imagen se venia a mi retina
Cecilia
Cecilia, te perdía

Y el tiempo quiso que lo maduremos
También fue a tu lado mucho tiempo
El hombre que escribió nuestras canciones
Atisbó bajo la luna aquella noche
En donde ella me llenaba de reproches
Y yo sentía la perdía.

La vida se teñía a cada paso
De un rosa griselado y apagado
De tanto en tanto fumaba en una esquina
Y tal vez ahora que la tengo lejos
La añoro mas ahora de perdida.

Cecilia,
Cecilia, te perdía.

Sin embargo que noches de la infancia
En mi cama yo soñaba con cecilia
Escuchando en compactos y cassettes
La canción que acompañaba mi vigilia.

Una tarde al volver a verla
Descubrí que su cara era perfecta
Bailarina de comparsa y de fiestas
Compañera de la vida y emociones


Cecilia con el tiempo fue creciendo
También fueron creciendo sus dos pechos
Sus piernas eran dos monumentos
Que flanqueaban a veces con el tiempo

Cecilia padecía de belleza
Encontrandose garrones en la mesa
A cada paso se sentía perdida
A cada beso, bronca y despedida
Y caminando ciega por la vida
Encontró al amor de su guarida


Y encontró a un amor muy verdadero
De esos que perduran con el tiempo
Aquellos se hacen fuertes con tormentas
Y a veces se decaen con el viento


Cecilia,
Cecilia, te perdía.
Cecilia,
Cecilia
Cecilia
Cecilia.

sábado, 14 de febrero de 2009

LA IDEA FIJA (fragmento)









-Mi amor, ¿Qué te parece si esta noche vamos a un telo?
-¿Para que Clarita? ¿No sabes que tengo que pagar cuentas y que no llegamos a fin de mes?
-¿Vos me hablas en serio?
-SI, ¿por?
-Por nada.
-…
-…
-¿te enojaste?
Clara negó con la cabeza mientras se levantó en dirección al baño. Entró sin prender la luz, buscaba una pincita de depilar en el botiquín. Álvaro la siguió.
-¿de verdad no te enojaste?... Dale Clarita….
Y ella seguía en la oscuridad en busca de la pincita.
-¿sabías que tenes un culo hermoso?... ¿Qué te parece si…??
Y Álvaro levantó las cejas en forma de súplica aunque Clara no lo vio. Apenas pudo sentir su reflejo en el espejo.
-No, Álvaro, así no…
-¿No querías innovar?¿porque no me entregas la…?- y le tocó la cola al tiempo que un beso de lengua le llegaba por el cuello. Clara se excitó.
Álvaro se bajó el pantalón, el boxer y quedó desnudo frente a su cola. Clara lo intuía por el espejo.
Y su pene aún erecto penetró su cola.
Y su cola era inmensa. Una flor abierta.
Y su pito era menudito. Un capullo cerrado.
Y Clara de golpe sintió todo.
El sexo erecto de Álvaro entre sus nalgas, la frente sobre el espejo, los testículos que le golpeaban sus piernas, el gemido que asomaba en su boca, el orgasmo que se venía.
Y allí pensó, luego de acabar. Que Álvaro no era agraciado pero al menos la sabía usar.












miércoles, 11 de febrero de 2009

como música en sus oídos


Dejó el libro de tapa dura sobre la mesa y se decidió a cambiarlo todo. Cerró la puerta del baño, tiró el cuadro de Diego Rivera que estaba sobre la cabecera de su cama y no le importó romperlo. A pesar de que había sido un regalo hermoso, le traía recuerdos que por ahora prefería olvidar. Con la colilla que le quedaba del cigarrillo prendió otro. Fumó tres pitadas y lo apagó. Se recostó y volvió a levantarse. Se sintió mareada. Necesitaba tomar algo. Se dirigió a la cocina. Abrió la heladera y se quedó parada frente a la luz que la encandilaba. Sus ojos brillaban como dos planetas en el universo. Eran dos huevos fritos en un plato. Agarró el vodka con las dos manos y engulló un trago largo y lo hizo pasar por su fina garganta hasta sentir que las traqueas se le deshacían de la quemazón. Se puso en cuchillas y esperó a que se le pasara el ardor. Cuando se sintió entera de nuevo, se irguió sobre sus pies blandos, con los que ahora caminaba hasta llegar al cuarto.
Volvió a recostarse y miró la hora. Y a pesar de que solo habían pasado unos minutos a ella le parecían horas. El silencio era crudo. El único sonido que se escuchaba era el aletear del ventilador que giraba a la velocidad de un molino sin viento. Y ella se entretuvo un par de segundos (que era lo que duraba su paciencia) observando.
“Me voy” le había dicho antes de iniciar la partida. Y le había devuelto las llaves del departamento que le había dejado a su nombre, fiel a sus gestos de caballerosidad. Y se quedó un rato esperando algo que no vino. Y se miraron alejados y en sus ojos se veían reflejados uno al otro como aferrándose a los recuerdos con la nostalgia de ponerle fin a algo que no debía ser.
Apagó las luces y prendió otro cigarrillo. Lo único que se veía era el punto de ceniza roja que iba desintegrándolo a medida que le iba dando pitadas tan largas hasta llenarse de humo los pulmones. De tanto en tanto se quedaba pensando en aquél momento en que él le se iba prometiéndole que la iba a llamar. La ilusión le daba vueltas en forma de esperanza, como un niño que espera que Santa Claus entre por la chimenea, o que el Ratón Pérez le deje el dinero bajo su almohada o que los Reyes Magos se tomen el pasto y le dejen los regalos soñados. Pero el tiempo lo único que hacía era confirmar la soledad que sentía bajo un manto de piel rugosa se volvía insoportable.
Alicia no lo vio pero hubiera jurado que lo había oído, que era su voz inconfundible que la llamaba que sonaba como música en sus oídos.


¿Estaba en lo cierto o era su imaginación?

martes, 10 de febrero de 2009

D E S A P A R E C E R


Un día naces y otro te morís. Un día sentís que tenes toda la vida por delante y otro te enteras que solo te quedan unos pocos.

Betty acaba de enterarse que le quedan quince.

Quizás menos. Pero no mas.

lunes, 2 de febrero de 2009

D E S A F Í O


-Te desafío
- ¿a que?
-A Amarme
-Desafío aceptado.
-¿me amas?
-Si
-¡¡Ganaste!!

domingo, 1 de febrero de 2009


ella quería ser actriz. Yo director.

sábado, 31 de enero de 2009

CANCER DE UNA MUJER SUICIDA. ESCENA UNO.


NORMA (45), ama de casa esta en su casa, sentada en su escritorio, frente al teléfono que mira ansiosamente. El teléfono comienza a sonar, se asusta, lo mira, respira hondamente y atiende.


NORMA
…Hola…sí, ella habla…. Doctor, ¿le puedo pedir que me diga la verdad?...


Norma se queda atónita, se le cae una lágrima que recorre todo su rostro hasta morir en su boca. Corta despacio, casi por inercia. Se seca los ojos, duda, se levanta y camina hasta la cocina, abre la llave de gas, duda de nuevo, se acerca a la hornalla y huele el gas. Se queda un buen rato, se empieza a sentir mareada. Cierra la llave de gas y se echa a llorar. Saca fuerzas de donde no tiene y se levanta. Camina hasta el baño, abre el botiquín y saca un frasco con pastillas, las vuelca todas sobre la palma de su mano, vuelve al escritorio donde se sirve un vaso de agua, suspira, se embucha las pastillas y mira la foto de su familia que hay sobre el escritorio, las escupe. Agarra los análisis que están sobre el escritorio, los rompe. Cierra los ojos, los vuelve a abrir. Se levanta, va hasta el cuarto, se cambia de ropa, va al baño, se maquilla, se perfuma, agarra un bolso, la llave y se va.


Al mes siguiente los familiares de la foto visitan la tumba de NORMA y le dejan flores.

viernes, 30 de enero de 2009

b u s c o p a s a r l a m u y b i e n

estaba pensando en dejarte un instante, un momento fugaz...
Y vuelvo a pensar en dejarte un instante, un momento fugaz...
la suerte te encuentra y es para mal: busca encontrarte y no te encontras

con quien te has de encontrar es con tu conciencia maldita,
.................y serena
que te dirá que no soy para ti.

estoy unido solo por sentido de atraciones mutuas que vos olvidás...

y recuerdo de nuevo aquella vez
en que yo pensé dejarte un instante
y no me animé.

jueves, 29 de enero de 2009

2 0 0 KILOMETROS

20 de julio de 2006 3.26 de la madrugada
Hoy ha sido un dia raro.
Espero se haga próxima la hora para tomar el micro que me lleva a la ciudad de mis sueños. No estoy ansioso. Estoy contento de haberme encontrado con un amigo que tenia olvidado. Espero, espero, espero mientras escribo.

VENGANZA FALLIDA DE UNA MUJER QUE CELA SIN SENTIDO


A R R E P E N T I D A
“Te llamé porque quiero que hablemos. En realidad quiero hablar yo y que vos me escuches. No se como empezó esto. O sí, sé, pero lo que te quiero decir es que no se que se me pasó por la cabeza cuando decidí llamarte, porque no lo niego. Lo admito. Fui yo. Yo te llamé. Pero bueno el caso es que lo hice y estoy arrepentida. ¿Escuchaste bien?, ¡¡arrepentida!! No quiero que pienses que soy una loca por eso te cité en este bar para decírtelo. Ya sé que es el mismo bar donde empezó todo, pero por eso mismo, me parece una buena alternativa para darle fin. Terminar donde comenzó todo. Quiero que entiendas que solo te busque para una aventura que ni siquiera disfruté. Y ¿sabes porque? Porque estoy enamorada de un hombre. Pero no de vos. De otro. Del mío. De ese que vos conoces. De Pedro. Además tenemos pensado tener un hijo. En realidad no me lo dijo con todas las letras pero me lo dio a entender. No se porque te cuento esto a vos pero me sale así. No quiero que te ofendas porque te soy sincera. Yo desde el primer momento supe que no quería nada con vos y que me obligaba a llamarte. Quizás ahora no lo puedas entender, o quizás no lo entiendas nunca, debe ser difícil, lo sé, pero es así. No te puedo seguir mintiendo porque tarde o temprano se iria todo al diablo y no es esa mi intención. Yo necesitaba tener este encuentro con vos, que nos viéramos y poder explicarte como fueron las cosas. Seguramente me estarás odiando en este momento y lo peor de todo es que me lo merezco. Ya no se que pensaras de mí, pero yo no soy así. Lo que pasó fue por venganza. Creo que la palabra venganza suena muy fuerte, pero no encuentro otra. Fue un momento de rabia contenida que se me fue de las manos. También sé que no debería haberte involucrado a vos en una venganza, pero si te soy sincera, en ese momento no me importó, lo único que me importó fue vengarme. Y vos fuiste el primero que se me cruzó por la cabeza. Y no por casualidad, te pensé premeditadamente. Busqué tu teléfono en la agenda de Pedro y te llamé descaradamente. Se que debería habértelo dicho antes pero te supe recompensar. Bien que disfrutaste. Ahora que lo pienso mejor, tampoco te hice sufrir tanto. Al fin y al cabo vos no me buscabas para casarte y formar una familia y mucho menos para que yo sea la madre de tus hijos. Lejos estoy de serlo. Además yo te aclaré desde el primer momento que todavía estaba con Pedro, en ningún momento te mencioné la posibilidad de dejarlo y mucho menos prometerte algo mas que una aventura sin sentido. Creo que lo mejor es que dejemos las cosas aclaradas desde ahora y para siempre. Lo bueno sería que pudieras perdonarme y seguir siendo amigos, pero dudo que puedas perdonarme y aun perdonándome dudo que podamos entablar una amistad sincera. Por eso lo mejor, es que no nos veamos más, por lo menos por un tiempo, hasta que se enfríen las cosas. Después quien dice nos volvamos a ver o por ahí no nos vemos nunca mas, aunque lo dudo porque el mundo es un pañuelo y se que tarde o temprano te volvería a ver y por eso es que me tomo este trabajo de decirte lo que me esta pasando para que cuando nos volvamos a ver, todo se de en otro contexto y podamos hablar como dos personas civilizadas, en fin es lo que somos. ¿O no? Yo no se que pensaras vos de esto pero yo tengo muy en claro lo que yo pienso y con eso a mi me basta, puede sonar egoísta pero yo se que no y eso me alcanza y me sobra para saber que estoy haciendo lo correcto y que después no me voy a arrepentir. Después ni nunca. Tengo la seguridad absoluta. Igual si me necesitas para cualquier cosa… bueno para cualquier cosa no… pero me refiero a cosas importantes que yo te pueda ayudar, no dudes en llamarme, aunque preferiría que no te encuentres en la necesidad de tener que hacerlo. De todos modos podes confiar en mí porque al fin y al cabo soy una buena mina, ¿o no? Si. Si, lo soy. No hace falta que me contestes, fue una pregunta retórica. Esas preguntas que uno se pregunta de gusto porque sabe cual es la respuesta. Y sé que no me equivoco, que estoy en lo cierto. Pero no vinimos acá para que me escuches decir que yo soy una buena mina, te llamé en principio porque necesitaba aclararte que todo ha sido una confusión, primero mía y después tuya y por ultimo de los dos. Vos y yo sabemos que no esta bien lo que estamos haciendo y eso a mi me genera un estado de culpa y supongo que a vos te pasará lo mismo, porque al fin de cuentas sabes que yo no te amo y los dos sabemos que cualquier hombre lo que mas quiere en la vida, aunque no lo digan, es una mujer o alguien que lo hago sentir amado.
A veces las circunstancias hacen que todo se de de una manera y no de otra, pero acá lo importante es que lo supimos tomar a tiempo. Y pudimos evitar una desgracia, porque el desamor es una desgracia. Pedro me ama y yo lo amo a él y si nos hubiéramos permitido seguir con esta locura hubiera sido terrible, ¿Quién dice terminábamos separándonos y odiándonos cuando en realidad en lo único que pensamos es en que termine el día para volver a vernos? A pesar de todo te tengo cariño pero no te amo y no puedo engañarte de esa manera, en primer lugar no puedo engañarme a mi por eso es hora de ponerle fin de una buena vez por todas. Ya estamos grandes para hacer cosas de chicos. Cualquier adolescente llevaría una relación mas madura que la nuestra. Ahora me voy a ir y no quiero que me vuelvas a llamar nunca mas“

Y Sofía enmudeció. Y en ese instante Lucio cayó en la cuenta que había hablado todo ese tiempo sin mirarlo, con la mirada fija en el aire.

viernes, 16 de enero de 2009

el espejo de la vida


desde las bambalinas sobreviene la magia,

mas allá del telón y las candilejas...

la cómplice penumbra de la sala...

el bullicio de esa gente que se adentra

la oscuridad que se enciende lentamente

la alegría de una prueba superada

y el telón que se levanta suavemente.


olvidar la tristeza algunos días,

ocultar lo que a veces da alegría

y sentir esa fuerza extraordinaria

el calor de los aplausos que te aclaman

vencer los miedos siempre,

salvar lo inesperado cuando estalla,

disimular la sed, el hambre, el frío,

el dolor, el desgano y la nostalgia.


Dejar a mi persona descansando

y convertirme como magia en esta otra...

y sentir que los disfraces que me visten

solo es parte de este mundo que no existe


un día y otro día, con esfuerzo,

despues de la rutina ciudadana,

viajo siempre a contramano

a ese mundo que esta lleno de fantasmas

y aunque sea un lugar de fantasía...

no dejo de sentirme reflejado

en el marco del espejo de la vida.



jueves, 8 de enero de 2009

MI " AMIGO" INSTANTANEO


Dias enteros que no escribo en mi blog, ¿trizteza tal vez?
puede ser...
Resulta que hoy venía caminando por la calle, llegando a casa después de mi clase de baile a la que asisto diariamente porque realmente disfruto, y lo venía venir y yo rezaba (mentira nunca rezo, era una suerte de suplica interna que hacia yo en mi cerebro) que aquello que venía hacía mi, no viniera y por un momento tuve la falsa ilusión de que siga su camino. Pero no. Y para colmo de males, las calles de Buenos Aires estaban vacías. Busqué con la mirada a alguien a quien pedirle ayuda en caso de que la cosa se ponga fea, pero no vi a nadie. Se me interpuso en el camino un joven, bueno, un hombre (porque ya era lo suficientemente grande como para ser joven, no hablo de edad sino de maduración) y me obliga a detener mi paso. Yo intento esquivar y seguir mi camino (llegar a Callao la Avenida por donde vivo y entrar a mi departamento) pero no hubo forma. Cuando lo esquivé se me volvió a interponer ante mi destino. Me estrecha la mano, yo la mía pero con desconfianza y ademas para no ser descortés, y le advierto de muy buena manera que no me puedo detener, que si quiere me acompañe mientras yo camino. Ehh amigo, ¿tan apurado estas? me dijo y yo sentí que esa palabra amigo estaba demás que jamás querría ser mi amigo ni yo el de él. Que evidentemente me iba a pedir algo. Me compré un fernet, me dice como si me estuviera invitando a la joda del sábado en la casa de los muchachos. Y yo lo miré creo que por primera vez a los ojos. Eran claros. Y entonces siguió: Me falta comprar la coca, y por un momento me imaginé tomando un fernet con coca con este desconocido. Pero ese era imposible, primero porque no lo conocía y segundo porque no me gusta el fernet con coca. Y entonces vino la pregunta obvia y descarada: ¿no me prestás diez pesitos? y creo que me vió cara de boludo, como si no supiera el precio de la coca. Mi mirada esta vez no fue respetuosa, fue acompañada de una risa irónica y el silencio lo dijo todo. Y nos miramos un tiempo largo, en realidad fueron apenas unos segundos pero el silencio es como que alarga los momentos. Y respondí: No tengo, si tuviera te daría, le dije como para que me dejara en paz y yo por fin pudiera llegar a mi casa, bañarme, entrar en internet, comer y dormir. ¿Seguro? y ahi la cara le cambió, es como si hubiera dejado de ser "ese" amigo instántaneo de esa tarde. Entonces me siguió en silencio unos poco metros mas que a mi me parecieron kilometros. Observándome. Cuando lo perdí de vista agradecí a Dios (creo) estar vivo. Al fin iba a poder cumplir mi destino. Casa estaba cada vez mas cerca. Y bañarme, y comer y entrar en internet y dormir también.
Y mientras subía el ascensor, recordé una fragmento del un libro titulado "El corazón del tártaro" de Rosa Montero que dice asi: " ...La infancia es el lugar donde habitas toda tu vida. los niños apaleados, apalean niños de mayores, los hijos de borrachos se alcoholizan, los descendientes de suicidas se matan, los que tienen padres locos enloquecen..."
Y cuando el ascensor llegó al piso doce, mientras abría la puerta me pregunté si el padre de mi "amigo" instántaneo habría sido alcoholico.